El tercer domingo de octubre, el día 24, se celebra la Jornada Mundial de las Misiones, el Domund, con el lema Cuenta lo que has visto y oído. «Cuando experimentamos la fuerza del amor de Dios, cuando reconocemos su presencia de Padre en nuestra vida personal y comunitaria, no podemos dejar de anunciar y compartir lo que hemos visto y oído», subraya el Papa Francisco en el mensaje para la jornada.
El Pontífice incide en que «la historia de la evangelización» arranca con «una búsqueda apasionada del Señor que llama y quiere entablar con cada persona, allí donde se encuentra, un diálogo de amistad» y pone el foco en que «los primeros cristianos comenzaron su vida de fe en un ambiente hostil y complicado», sufriendo incluso persecuciones y amenazas, pero eso no los llevó «a replegarse o ensimismarse», sino que supieron «transformar todos los inconvenientes, contradicciones y dificultades en una oportunidad para la misión». «Nada ni nadie podía quedar ajeno a ese anuncio liberador», asevera.
En este sentido, asegura que «tampoco es fácil el momento actual de nuestra historia», cuando «la pandemia evidenció y amplificó el dolor, la soledad, la pobreza y las injusticias que ya tantos padecían y puso al descubierto nuestras falsas seguridades y las fragmentaciones y polarizaciones que silenciosamente nos laceran».
«Hemos experimentado el desánimo, el desencanto, el cansancio, y hasta la amargura conformista y desesperanzadora pudo apoderarse de nuestras mirada», asevera, pero «Jesucristo verdaderamente vive» (Evangelii gaudium, 275) y «urgen misioneros de esperanza que, ungidos por el Señor, sean capaces de recordar proféticamente que nadie se salva por sí solo».
Apoyo a los misioneros
Como señala Francisco, el Domund, con las distintas actividades que impulsa Obras Misionales Pontificias (OMP), es una ocasión para recordar «agradecidamente a todas esas personas que, con su testimonio de vida, nos ayudan a renovar nuestro compromiso bautismal de ser apóstoles generosos y alegres del Evangelio», especialmente a los misioneros que han querido «salir a las periferias del mundo y convertirse en mensajeros e instrumentos de compasión».
Para colaborar con su tarea, se puede hacer un donativo puntual o un donativo periódico a través de su web, así como mandar un Bizum con el código 00500 o mediante transferencia a la cuenta ES32 0049 5117 2821 1009 4950 de OMP. Puede encontrarse toda la información en la página web de OMP.
PUBLICADO EN ARCHIMADRID