La ley es amar a todos y a quien es todo
La Misionera Idente Angela Cantueso ayuda a profundizar en el evangelio del domingo XXXI del Tiempo Ordinario.
Lo que de verdad importa
Aunque sea el título de una reciente película, el evangelio de este domingo nos sitúa en la encrucijada vital que toda persona, tarde o temprano, se encuentra: lo que de verdad vale la pena.
San Marcos nos lo recuerda en el diálogo que Cristo mantiene con un escriba que le pregunta sinceramente por el mandamiento principal. Él le responde que lo primero es amar a Dios con todo nuestro ser. Pero ¿Qué significa amar a Dios? Tenerlo presente en mi corazón, en mis decisiones, aceptar que Él cambie mis planes… Y como consecuencia de ese amor a Dios, brota necesariamente el amor al prójimo. El Reino de Dios consiste en reconocer que el amor emana de Dios, y Él nos lleva siempre a los demás que reconocemos como hermanos por tener un mismo Padre. Un amor que no se queda en mero sentimentalismo sino que se concreta en hechos cotidianos.
Tengo a menudo presente una experiencia que cambió en gran medida el rumbo de mi vida. Un familiar muy querido, ya en el hospital y cercana su muerte, a solas, me dijo: “Tanta lucha en cosas vanas… tú afánate siempre por cosas que realmente merezcan la pena” Confieso que no comprendí del todo su sentido hasta que experimenté que la vida se hace plena en la medida en que se entrega. Lo que de verdad importa en la vida se resume en una sola palabra: AMOR. Lo único que nos llevaremos a la vida eterna.
PUBLICADO EN DIÓCESIS DE MÁLAGA